Pesar por deceso del médico Carlos Gabino

Foto del profesional haciendo declaraciones al periodista fernandense Ricardo Basualdo

En la jornada del lunes se produjo el fallecimiento del Dr. Carlos Gabino a los 88 años de edad, un especialista en cardiología que ejerció durante varias décadas con suma dedicación y de la cual fue docente, consultor y palabra muy valorada por las siguientes generaciones de colegas.

Los restos del reconocido profesional fueron velados este martes de 9 a 13 en el complejo fúnebre de la calle 69 N° 2547, para después ser trasladados al crematorio ubicado en ámbitos del Cementerio Municipal de nuestra ciudad.

El Dr. Gabino fue un activo concurrente de congresos y eventos vinculados a la cardiología, donde en algunos casos fue disertante, y el reconocimiento que adquirió fuera de Necochea le sirvió para ser integrante del Instituto de Bioética de la Academia Nacional de Ciencias Morales y Políticas.

Fuera del ámbito de la medicina fue, hasta la actualidad, miembro del Rotary Club Necochea. Con una personalidad que transmitía seriedad y respeto, Carlos Gabino era dueño de un sano humor entre sus amigos, con intervenciones criteriosas y acertadas en cualquier charla.

Amigo de Favaloro

Amante de la música clásica en sus momentos de ocio, Carlos Gabino era admirador del Dr. René Favaloro, de quien fue amigo. Y en varias columnas con su firma que se publicaran en Ecos Diarios destacó las dotes profesionales y humanas del médico platense.

Junto a Ana, su esposa, tuvieron cuatro hijos: Mariano, que siguió su profesión , pero en la rama de la cirugía; Juan Martín, licenciado en Informática, María del Rosario y Mercedes, quien reside en Alemania y se dedica al periodismo.

Tras haber soportado un ACV mientras participaba de un congreso de cardiología igualmente se repuso y continuó con su profesión, la que había dejado hace unos años por el desgaste en su salud.

“La función del médico es curar a veces, aliviar a menudo y confortar siempre”, dijo a Ecos Diarios alguna vez, con motivo de celebrarse el Día del médico. En definitiva, la frase describía la esencia de Gabino con el ejercicio de una profesión que amó y desempeñó con esmero durante más de seis décadas.-

Fuente: «Ecos Diarios».-