
Las intensas lluvias registradas durante los últimos días en amplios sectores del norte bonaerense dejaron acumulados, en algunos casos de más de 400 milímetros. Los partidos más afectados fueron Chivilcoy, Chacabuco, San Antonio de Areco y alrededores. Sin embargo, el evento también tuvo impacto en zonas del oeste bonaerense, como 9 de Julio, que ya había sido afectado previamente por precipitaciones durante el mes de marzo.
En este marco, la Bolsa de Cereales de Buenos realizó un panorama del impacto de las lluvias en los cultivos de las zonas afectadas.
“Desde el punto de vista productivo, aún resta por cosechar una proporción significativa de la superficie sembrada con soja y maíz tardío. La región más comprometida es el norte bonaerense, donde restan por recolectarse aproximadamente 530.000 hectáreas de soja, las cuales podrían presentar algún grado de afectación”, indicó la entidad.

Por otro lado, aunque los acumulados fueron inferiores a los registrados en la mencionada región, “parte del oeste bonaerense recibió lluvias del orden de los 80 a 100 mm. Aquí, aún restan por recolectarse 730.000 hectáreas de soja, aunque el evento solo recayó en parte de la región, por lo que solo parte de esa superficie estaría afectada”, explicó.
Y agregó: “Cabe señalar que esta región ya había sufrido el impacto de las precipitaciones ocurridas en marzo, generando una demora interanual de -14,7 p.p. en el avance de cosecha, por lo que los nuevos acumulados podrían generar pérdidas importantes”.
Maíz
En cuanto al maíz, el avance de cosecha en el norte bonaerense se aproxima al 90%, con remanentes correspondientes principalmente a planteos tardíos y de segunda ocupación, los cuales abarcan una superficie estimada restante de ser cosechada en 120.000 hectáreas, según las estimaciones de la Bolsa porteña.
“Hacia el oeste bonaerense, si bien todavía resta por cosecharse una mayor superficie, no se esperan mermas productivas significativas a nivel regional para este cultivo”, explicó el informe.
Para finalizar, el informe señaló que de cara a los próximos días, se pronostican bajas temperaturas y algunos acumulados de lluvia adicionales, “lo que dificultará el secado de los cultivos”. “Por lo tanto, será necesario aguardar a que mejoren las condiciones del suelo y del grano para permitir el reingreso de las cosechadoras y poder dimensionar con mayor precisión el impacto final de este evento sobre la producción”.-
